Roadtrip Literario

El viernes pasado me lancé al DF a conocer Editorial Alfaguara. Nos lanzamos desde las 7 de la mañana. Ibamos en un grupo bastante peculiar: la vicepresidenta del CEUDLA, el líder moral de Helecho y el editor de La Catarina. ¡Ah! y un español. Después de 3 horas de viaje, mucha plática y desorientación por parte de todos, llegamos a Alfaguara.

En la entrada nos recibió Ramón Córdoba, editor ejecutivo de la editorial. Nos llevó con Marisol Schultz, mera mera de Alfaguara y Taurus. Se puso a platicarnos acerca de su labor y lo que implica ser editor literario. Como a los 15 minutos, una llamada interrumpió la plática. Era Carlos Fuentes. La conversación prosigió entre datos, números, anécdotas y chascarrillos.

Después nos dieron un recorrido por las instalaciones. Fuimos a la zona de impresión, a la zona de placas, al área de diseño y, finalmente, al trabajo del editor. Fue una visita sumamente interesante y divertida. Ramón C. nos dio algunas cualidades que debería tener el editor: cultura enciclopédica, ojos de águila, espalda [y nalgas] de acero, comunicación directa con Dios [por eso de echarle la persignada al trabajo], autoconocimiento y humildad franciscana. Yo agregaría mucho instinto y sentido del humor.

Ya por las 3 de la tarde emprendimos el regreso. Casi todos, porque el español se quedó a turistear. El tráfico estaba insufrible. La vicepresi y yo nos mantuvimos despiertos, mientras que los otros dos acompañantes se fueron a la tierra de los coyotes. Llegamos a las 6 de la tarde, después de un viaje cansado y agotador, pero bastante entretenido y enriquecedor. Un bonito roadtrip por el mundo real literario.